lunes, 24 de enero de 2011

Perdida




Ayer, y tras 20 días de coma, mi vecina perdió al segundo de sus hijos. Un accidente de coche, igual que perdió al primero.
El primero, era mi amigo. Fue el velatorio mas difícil al que he asistido. Desde ese día, cada vez que me veía, me decía que tuviera mas hijos, que no tuviera solo uno, porque una desgracia como la que le había sucedido a ella acabaría conmigo, si solo tuviera un hijo y ella daba gracias a Dios por tener a su hijo pequeño con ella.
He sido incapaz de ir al velatorio y tampoco he ido al entierro… por cobardía, creo.
No se me ocurre la manera en que una mujer pueda superar la muerte de sus dos hijos, no se me ocurren palabras de consuelo para esa madre.
Desde ayer, no me he separado de mi hijo en ningún momento, he dormido con él, intentando así atesorar todos los recuerdos posibles pensando en que alguna vez sean lo único que me quede.
Pero una y otra vez en estos días, mi mente y mi corazón quisieran encontrar la forma de aliviar un poco el sufrimiento y el dolor que se debe sentir. Pero creo que no existe.